Tras cerca de dos semanas offline que han seguido a la práctica destrucción del servidor donde este blog estaba hospedado, vuelve a la vida. Han sido unos días lo que se dice angustiosos, porque durante varias jornadas parecía que no habría forma de recuperar el funcionamiento y tampoco los contenidos. Bendito Internet Archive y bendita Wayback Machine, porque no pocos artículos no habían desaparecido del todo sólo porque estaban allí almacenados.
El resultado es que ahora TPG:Génesis está alojado en un servidor más potente y dispone de un sistema adicional de copias de seguridad. Podrá volver a explotar pero no se van a volver a perder contenidos, a menos que ahora exploten varios ordenadores de forma simultánea. ¿Pero a qué precio? Se perdieron las últimas cuatro entradas publicadas y/o programadas, se ha roto la periodicidad y un porcentaje para nada despreciable de entradas antiguas por diferentes motivos.
¿Y a partir de ahora qué? A servidor muerto, servidor puesto
Durante las próximas semanas podemos contar con que esto va a ir todavía al ralentí, mientras compruebo que todo funciona como debe. Sé qué artículos recientes se han perdido y puedo reescribirlos, lo cual haré con el tiempo. Pero también hay unas cuantas entradas antiguas, que ahora están desaparecidas, que bien merecen un buen lavado de cara (o una reescritura completa, ya puestos) y tener una vuelta mejorada, en lugar de sólo recuperar textos antiguos.
Otro efecto secundario de haber recuperado manualmente tantos contenidos antiguos es que soy consciente de que hay un caos organizativo. Así que a lo largo de las próximas semanas, mientras van saliendo las primeras entradas postapocalipsis, voy a reorganizar categorías y etiquetas del blog. Que va a seguir siendo un caos de contenidos, pero al menos que ese caos sea navegable y no la maldita disformidad.
A lo mejor incluso, aprovechando que tanto tiempo offline ha matado la relevancia en buscadores, lo paso de la dirección del subdominio al dominio principal. O lo mismo me da flojera y no. Ya veremos.
En cualquier caso, espero que en breve pueda retomar la programación habitual.
«Ah, shit, here we go again».