Traemos en esta ocasión un personaje de ejemplo pregenerado para Tipos Duros que trae el clásico tropo de las películas de tortas del badass preacher. Porque la sabiduría popular no puede estar equivocada: a Dios rogando y con el mazo dando. Además, todo el mundo sabe que, con una pistola y una palabra amable se llega más lejos que con sólo una palabra amable. Por no hablar de que no podemos esperar que Dios haga todo. Creo que se entiende.
La historia del Padre Santiago
Santiago Torres y Doliente nació en San Juan, Puerto Rico. De una familia bastante pobre, desde muy pequeño cometió pequeños delitos y al final de su adolescencia ya formaba parte de una banda en escalada criminal. Durante un robo en una tienda atestada de clientes el dueño se resistió y uno de los otros pandilleros respondió sacando un pequeño revólver y disparándole varias veces. El tendero, una clienta y su hija pequeña recibieron las balas.
El todavía joven Santiago quedó en shock y en busca y captura. Huyó, en una de meses a través de Haití, Cuba, México, Nuevo México y años de vagabundeo a lo largo de muchos otros estados. En ese tiempo el horror y el remordimiento por haber participado de aquel crimen lo corroían desde dentro. Temeroso de Dios, sabiendo que para él ya era demasiado tarde y que iría al infierno, decidió dedicar su vida a evitar que a otros les pudiera ocurrir lo mismo. Mientras malvivía trabajando en lo que le salía entró en un seminario católico, donde entendía como una prueba el racismo que recibía.
Ya ordenado sacerdote, años después, fue enviado a una pequeña parroquia en un barrio deprimido de la ciudad de Wildspring, en el estado de Maryland. Allí le fue bien durante un tiempo, en que su experiencia ayudó a no pocos chavales a esquivar la vida de delincuencia y las pandillas. Fue durante este tiempo en que trabó amistad con el abogado Charles Lanier, tanto por la defensa de los chavales como por tener una historia con puntos en común.
El arco de redención se vuelve más arco
En algún momento la droga comenzó a fluir por el barrio, llevada por los hombres del Cártel de las Tres Calaveras. La cocaína y las balas volaban bajo las órdenes de Ricardo Sietebalas, al tomar las calles como si fueran su propio feudo. El padre Santiago vio entonces como sus esfuerzos para mantener las vidas de sus feligreses fuera de la criminalidad se venían abajo. Cuando una familia entera fue asesinada por negarse a esconder cargamentos de droga en su propia casa, se derrumbó. Estuvo meses casi sin salir de casa, apenas atendiendo los oficios pero sin relacionarse. En todas aquellas semanas muchas personas de la parroquia lo cuidaron y animaron, lo que le devolvió la fe en que las cosas podían mejorar.
El padre Santiago volvió a la calle habiendo descubierto que a veces ser «mansos como palomas pero astutos como serpientes» sólo tiene sentido si alguien se sacrifica para proteger a los mansos. La situación para las buenas personas era insostenible y él seguía teniendo la idea de ser un pecador condenado. Santiago Torres y Doliente, al igual que Jesús en la cruz, se sacrificaría para salvar del pecado a su rebaño.
Se hizo con una vieja escopeta oxidada, la limpió y, a modo de símbolo, la lubricó y protegió con aceite de ungir. Luego entró a fuego y sangre en el principal piso franco de las Tres Calaveras en el barrio. Después de tres frenéticos minutos de las nueve personas, con él mismo, que había en ese momento en el piso, sólo Santiago seguía respirando. Les dio la extrema unción a todos antes de irse. Aquella fue sólo la primera de varias actuaciones.
De momento las Tres Calaveras no saben quién es el justiciero que caza a sus hombres, porque el Padre jamás deja testigos pecadores. Pero es cuestión de tiempo que lo descubran y lo persigan hasta la muerte.
Y haré en ellos grandes venganzas con reprensiones de ira; y sabrán que yo soy Jehová, cuando haga mi venganza en ellos.
Ezequiel, 25-17
Perfil en Savage Worlds Edición Aventura
El Padre Santiago es un personaje de ejemplo de Tipos Duros creado con las reglas de SWADE Experimentado (con 4 avances).
Atributos: Agilidad d6, Astucia d6, Espíritu d6, Fuerza d6, Vigor d8.
Habilidades: Apostar d4, Atletismo d4, Conducir d4, Conocimientos generales d6, Disparar d8, Humanidades d6, Interpretar d4, Latrocinio d4, Medicina d4, Notar d6, Pelear d4, Persuadir d6, Sigilo d4.
Paso: 6; Parada: 5*; Dureza: 6*
Ideal: El protector.
Desventajas: Buscado (menor), Enemigo (mayor), Obligaciones (menor).
Ventajas: Afortunado, Callejear, Rápido.
Ventajas de molonidad: Duro como el acero, El infierno le seguía.
Equipo: ropa negra de calidad con alzacuellos, ganzúas, palanqueta, escopeta Remington M1100 (Alc. 10/20/40, Daño 1-3d6, CdF 1, Semi-auto), 25 balas de escopeta y 50 cartuchos, cuchillo camuflado en la suela del zapato (Fue+d4), táser, ciclomotor de color caqui, 365$.
Sus rasgos específicos de Tipos Duros son su Ideal, El protector, y sus Ventajas de molonidad, Duro como el acero y El infierno le seguía. El protector le conmina a hacer cosas sólo con el objetivo de proteger a los más desvalidos, aunque le perjudiquen a él. Duro como el acero lo hace más difícil de golpear y herir. Por último, El infierno le seguía hace que las cosas que él destruya simplemente exploten. Nada mejor para mantener un perfil bajo que convertir una tienda de jarrones en el equivalente de la fiesta de las granadas de mano.
Mejores explicaciones sobre todo esto puedes encontrarlas en el manual de Tipos Duros en Itch.io, que amplía las reglas de Savage Worlds.
Este artículo fue publicado el 21/04/2014 y fue afectado por la Gran Debacle. Para recuperarlo las reglas han sido actualizadas a la última versión de Savage Worlds.
